El mundo se pone a sus pies para que expriman sus vacaciones al máximo. Una ruta por la montaña, disfrutar de la naturaleza en una casa rural, darse un chapuzón en la playa, explorar una nueva ciudad o vivir como un nómada en un camping son algunos de los planes que se pueden hacer en familia y que los peques disfrutarán de lo lindo. Hoy te desvelamos qué compañera de viaje necesitan según el plan que elijas porque, lejos o cerca, toda aventura debe ir acompañada de una maleta de viaje para niños que les siga el ritmo. ¡Allá vamos!
1) Rutas de montaña: Una actividad sin límites
Aprovechar las vacaciones para hacer senderismo es una de las actividades más recomendadas para practicar en familia. Y es que un simple paseo por el campo puede reportarnos innumerables beneficios y a ¡nuestros peques también! Se mantendrán en forma mientras se sumergen en un entorno diferente al habitual. Descubrirán el placer de lo natural, respirarán aire puro y, por el camino, aprenderán el nombre de diversas plantas y animales. Y todo ello ¡al mismo tiempo que se lo pasan en grande!
LA MALETA IDEAL
2) Campings: ¡vacaciones al aire libre!
¡Qué buena idea! Con el buen tiempo no hay nada más apetecible que disfrutar de la naturaleza o la playa. Y el camping es, sin duda, la mejor opción. El peque no parará quieto. Que si actividades al aire libre, que si chapuzones en la piscina, que si rutas de exploración por los alrededores…. ¡mil y una aventuras! Y además, seguro que, conocerá a un montón de amigos nuevos. Un camping le ofrecerá experiencias que le ayudarán a ganar autonomía y seguridad, además de aumentar su autoestima y ofrecerle mayor libertad.
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3) Casas rurales: Acercándose a la naturaleza
Otra forma de viajar. Di adiós a los viajes largos en avión, a los hoteles de 7 plantas y a las piscinas llenas de gente. La naturaleza os está esperando para daros la bienvenida y ofreceros su lado más amable. Porque el turismo rural con niños es una opción ideal para planear unas vacaciones: tiene las comodidades de un hotel, pero con la sensación de sentirte como en casa. Una sensación que cada vez nos gusta más y que incluso en Dinamarca se le ha acuñado bajo el nombre de Hygge.
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4) Playa: Diversión cerca del mar
Es ilimitada. Los pequeños se lo pasan “pipa” cuando están allí. Es refrescante y carga las pilas. ¿Sabéis de que hablamos? ¡Correcto! De la playa. Y es que, si los planes de montaña que te hemos ofrecido no te han convencido, siempre puedes optar por hacer castillos de arena, jugar a las palas, dar un paseo o tomar el sol (siempre con protección solar). Los protagonistas serán ellos. ¿Os animáis?
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5) Explorar una ciudad: Lejos o cerca, la aventura será extraordinaria
No hace faltar irse muy lejos para disfrutar de una experiencia inolvidable. Ir al pueblo de al lado o coger un avión para descubrir una ciudad al otro lado del mundo hará que los más peques se sientan auténticos exploradores. Y es que involucrar a los niños en los viajes familiares es una buena forma de que vean nuevas realidades, se sumerjan en nuevas culturas e incluso, en algunos casos, aprendan idiomas casi sin ser conscientes de ello. Lo que es seguro es que destapará su curiosidad y fomentará su capacidad de adaptación. ¿Necesitas más?
LA MALETA IDEAL
Los planes son infinitos. Ya seáis de mar o montaña siempre hay una opción ideal para que tanto vosotros como vuestros peques os lo paséis genial. Y es que eso de quedarse en casa en vacaciones ya no es una opción. Ahora vayáis donde vayáis, los más jóvenes estarán preparados para disfrutar con el equipaje perfecto. Y vosotros, ¿cómo pasáis las vacaciones? ¿Qué planes tenéis? ¡Cuéntanoslo!